ESPECIFICACIONES
Tejidos | Mikado, Encaje, Perdería |
Estilo | Princesa |
Tallas | 32 – 64 EU |
Escote | Corazón |
Espalda | Ilusión |
Accesorios | Este vestido destaca por sí solo, por lo que se recomienda combinarlo con un velo catedral de tul liso, fijado en un recogido. Con unos zapatos sofisticados, preferiblemente stilettos o zapatos joya. El tocado ideal es una diadema estilo tiara con pedrería fina o una corona de estilo más etéreo y sutil para complementar sin competir con el dramatismo de las mangas. Se recomiendan joyas discretas, como pendientes de lágrima o pequeños brillantes. |
Cuidados | Se recomienda conservar el vestido en una funda de almacenamiento amplia y rígida para evitar el aplastamiento del tul y el encaje. Colgar el vestido en un lugar fresco y seco. Dada la pedrería y el glitter, se recomienda una limpieza profesional en seco por expertos. El planchado debe realizarse exclusivamente con vapor, manteniendo una distancia prudencial para no dañar las aplicaciones de la tela y el brillo. |
Siluetas favorecedoras | El corte princesa es universalmente favorecedor. Es excepcional para siluetas rectangulares y de triángulo invertido, ya que el gran volumen de la falda estrecha visualmente la cintura y equilibra los hombros. También favorece a la silueta pera y reloj de arena. La sutil transparencia del escote y las mangas largas aportan verticalidad y elegancia. |
Estilos de boda | El vestido LABINIAD es un vestido diseñado para bodas clásicas y formales de máxima etiqueta. Ideal para ceremonias religiosas en iglesias imponentes o recepciones de noche en salones de baile, palacios, castillos o grandes hoteles de lujo. Su presencia y brillo son perfectos para eventos de tarde-noche. |
Planificación | Este vestido encaja en las tendencias nupciales actuales, que apuestan por la elegancia y el dramatismo, encaja tanto con decoraciones elegantes, simples y minimalestas como con aquellas mnas grandiosas y detalladas. Los peinados recomendados son los recogidos pulidos y sofisticados, como moños bajos trenzados o chignons clásicos, que despejen el cuello y permitan lucir el trabajo de las mangas y el tocado, acompañado de un maquillaje glamuroso, con ojos bien definidos y labios en tonos neutros o rojos suaves. El ramo debe ser compacto y elegante, de líneas limpias. |